![]() ![]() * My first lesson in the First Commandment of investigative journalism: Follow the Money. In his darkest hour, he gave the press its finest hour. ![]() * It is wonderfully ironical that a man who so disliked-and never understood-the press did so much to further the reputation of the press, and particularly ‘The Washington Post’. I wrote for almost fifteen years before I felt reasonable sure of turning in a coherent, well-written story. * Writing is an acquired skill, at least for me. ![]() Miguel Arias Contreras Drake-McLaughlin (Flickr) Estas son algunas -sólo algunas- de las líneas que he subrayado: El libro fue traducido al español por Aguilar en el 2000 con el título La vida de un periodista, pero es muy difícil encontrarlo. Kennedy, su relación con Phil y Katharine Graham y cómo levantaron el caso Watergate. En A Good Life (Simon & Schuster), Bradlee repasa toda su vida: su niñez -superó una polio-, sus inicios en el periodismo, su amistad con John F. Él siempre dijo que había sido un tipo con suerte, pero las necrológicas dicen que es uno de los periodistas más importantes de la historia.Įn 1995 publicó sus memorias. Ben Bradlee es el hombre que puso a The Washington Post, un periódico de tercera categoría cuando asumió la dirección en 1965, a la altura de The New York Times. Con Bradlee al frente, el Post fue capaz de seguirle la exclusiva de los papeles del Pentágono al Times y provocó la dimisión de Richard Nixon como presidente de Estados Unidos. ![]()
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